AGULO
El municipio de Agulo tiene una extensión de 2.539 hectáreas y más del 30% de su territorio está incluido en el Parque Nacional de Garajonay. Se trata de su parte más elevada, por encima de los 800 metros de altitud, ocupada por el bosque de laurisilva de La Gomera.
La historia de los usos del monte en la isla es bastante compleja. Sobre todo porque la masa forestal siempre ha estado bajo algún tipo de administración y posee un valor estratégico como recurso. Desde la época de los condes a los ayuntamientos, la administración estatal, o la llegada, en los años 70, del Instituto para la Conservación de la Naturaleza (ICONA).
En 1981 se declaró el Parque Nacional de Garajonay, el más reciente de Canarias, y se consolidó la protección de este importante recurso de todos los gomeros. La isla cuenta con la mejor muestra conocida de laurisilva, un ecosistema proveniente de la Era Terciaria, que desapareció del continente europeo como consecuencia de los cambios climáticos ocurridos en el Cuaternario.
EL MUNICIPIO DE AGULO
A principios del siglo XV distintas expediciones europeas arribaron a las costas gomeras. Los portugueses, enviados por don Enrique el Navegante, arribaron al norte de la isla y durante treinta años convivieron con los antiguos gomeros e iniciaron su evangelización.
La Gomera prehispánica estaba dividida en cuatro cantones: Orone, Ipalán, Agana y Mulagua, al que pertenecía el territorio del actual Agulo. Ya bajo dominio de la Corona de Castilla, el municipio se funda en 1607, cuando los señores de La Gomera y Hierro otorgan tierras en la zona de Sobreagulo y San Marcos a colonos procedentes de Buenavista del Norte (Tenerife).